Santa Ana Sobre Santa Ana nada sabemos de cierto. No se menciona en el Nuevo Testamento y debemos basarnos en la literatura apócrifa, especialmente en el Protoevangelio de Jaime, que data solamente del siglo Ir. En ese documento nos dice que Ana, mujer de Joaquín, tenía bastantes años y que sus oraciones para tener un hijo no habían sido favorecidas. Cierta vez, cuando oraba bajo un laurel cerca de su hogar en Galilea, se le apareció un ángel, el cual le dijo : «Ana, el Señor ha oído tu súplica y concebirás y parirás y de tu simiente hablará todo el mundo.» Ana contestó : «Si el Señor mi Dios lo concede, sea varón o hembra, lo ofrendaré a Dios mi Señor, y le servirá en las cosas santas mientras viva.» Y así Ana fue la madre de la Bendita Virgen María. El culto de Santa Ana se conocía en Oriente desde el siglo v, pero no se difundió en Occidente hasta el siglo mi/. Un santuario en Douai, en el norte de Francia, fue uno de los primeros dedicados a este culto. En el año 1382 su fiesta se extendió por toda la Iglesia occidental y se hizo muy popular, especialmente en Francia. Sus dos santuarios más famosos son el de Santa Ana de Aurai en la Bretaña y el de Santa Ana de Beaupré en la provincia de Quebec. Es patrona de las esposas, mujeres encinta, mineros y otros; su emblema es una puerta. Frecuentemente ha sido representada en arte y el rostro encantador que pintara Leonardo de Vinci nos viene a la mente al recordarla. El nombre de Ana deriva del hebreo Hannah, que significa «gracia». San Joaquín Nada se sabe acerca de San Joaquín, excepto lo que relata 12 literatura apócrifa. Era un hombre de Galilea, esposo de Ana, y tanto él como su mujer se hallaban en edad avanzada cuando nació María. La tradición cuenta que mientras Joaquín estaba fuera de su casa tuvo una visión de que Ana sería bendita con un hijo y que, al regresar a su casa, su mujer corrió a decirle que había recibido la visita de un ángel el cual le había revelado las mismas nuevas. Existía una antigua creencia de que el hijo nacido de madre anciana, que hubiera abandonado toda esperanza de tener descendencia, estaba destinado a algún alto propósito y sería bendito por todo el mundo. Hay historias similares en el Antiguo Testamento en los casos de Raquel, madre de San José, y de Hannah, madre de Samuel. La tumba tradicional de Santa Ana y San Joaquín fue descubierta en Jerusalén en 1889.
-San Siro de Pavía ObispoS. Siro de Palestina, fue amaestrado y le levantado a ministro de Dios de los discípulos de los Apóstoles. Tomado consigo el san joven luvenzio, fue...
-Nuestra Señora de Loreto Los santuarios dedicados a Maria son esparcidos en todo el mundo, porque la Virgen siendo mamá de todos, quiere estar vecina a todos sus hijos. Uno...